12/05/2007
Petra, eres el mejor grupo que he conocido, simplemente gracias
Petra - Beyond Belief
Hillsong - Take It All
Ideas - Pensamientos - Reflexiones
Petra, eres el mejor grupo que he conocido, simplemente gracias
Petra - Beyond Belief
Hillsong - Take It All
"...encontré en medio de un mar de lectura cibernética, un artículo interesante, en donde se expone y desvela de una manera simple "La Fe Tóxica", tratando de comprender un poco más sobre la "Fe en Dios".
Esta demás decir que nos reímos, compartimos, hablamos de aquellas cosas vividas. Charlas y silencios. Miradas y recuerdos. Momentos cortos, pero edificantes. . .
. . . recuerdo aquel libro que leí en donde decía el autor: “es muy difícil encontrar un buen amigo, más difícil todavía es dejarlo e imposible olvidarlo”.
En fin, creo que este pequeño texto es un homenaje a todos aquellos, que por circunstancias de la vida y también por distancias, no he podido verlos, visitarlos y compartir. Siempre va a estar la oportunidad de encontrarme con ellos, esos personajes que se cruzaron en mi vida y que de alguna manera han marcado algo a mi existencia.
Habrá ocasión en algún lugar, en algún momento, en donde podamos encontrarnos y compartir nuevamente algo.
Lois L. Kaufman dijo: “Si planta una semilla de amistad, recogerá un ramo de felicidad”.
La avaricia es como una serpiente venenosa. Se enrosca en nuestro cuerpo lentamente. Nunca está sastifecha, uno mismo la alimenta y el hambre se acrecienta. El llanto de la avaricia es: "Esto nunca será suficiente". Seguro que esto lo viste en otras personas y también lo sentiste vos mismo: sólo un pedazo más de pastel; una hora más de trabajo; nada más que un nuevo vestido…, la avaricia o codicia es el aspecto más destacado de eso que llamamos "buena vida".
La palabra clave de la avaricia son: más, más y más. La palabra griega significa "desear más". En el mundo antiguo, la avaricia era considerada como un vicio mortal y en el Nuevo Testamento es condenada.
Para tener algo más sintético sin caer en tantos preámbulos puedo citar lo que nos enseño Jesús y se encuentra en Lucas 12:16-21. El narró una historia bien sencilla sobre la avaricia. Un hombre rico span class="eacep">Afán desordenado de poseer y adquirir riquezas precogió una abundante cosecha pero no tenía dónde guardarla así que derribó sus graneros para construir otros mayores y así poder guardar todo lo que había ganado. Tambien decidió que había llegado el momento de disfrutar la vida. Había logrado todo lo que deseaba pero se repetía a sí mismo: "Más, yo quiero más". Lo que recibió, sin embargo, no era lo que él esperaba. Dios le dijo: "Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?"(v.20)
El afán de acumular conduce cada vez más a un sentimiento de insastifacción. La avaricia nos hace desbordar los límites, distorsiona nuestros valores y nos hace vender nuestra integridad para obtener algo que deseamos. La avaricia produce que perdamos más de lo que hemos ganado, porque en el afán de adquirir, descuidamos otros aspectos de nuestra vida. ¿Cuántas relaciones se han destruidos por el afán de obtener cada día más? Al final de cuentas, ¿que es lo que realmente nos podemos llevar al otro mundo? Cuando nos toque el turno de pasar a la eternidad no nos llevaremos absolutamente nada de los material, por este motivo debemos tener siempre la humildad de saber hacia donde apunta nuestro corazón, y que es lo importante de estar viviendo en este mundo.
Claro esta, como dice una publicidad: "...si estas en este mundo nesecitas visa", y es este mismo sistema económico global el que te quiere atrapar, y esta en nosotros que nos atrape. No estoy en contra del sistema (porque vivo en ella), simplemente no estoy de acuerdo con la manipulación que esta acarrea, sumado a la codicia del ser humano. Justamente es ahí a donde apunto: “cada hombre es responsable” de cómo vive su vida en este mundo, y cuando hablo de responsabilidad me refiero a ser lo adecuadamente maduro para poder persuadir cuando la avaricia atenta a nuestro ser. Porque todos estamos, en cierta medida, al alcance de ella.
Una de las definiciones de la avaricia dice claramente que es “Afán desordenado de poseer y adquirir riquezas para atesorarlas.”